Cuando se habla de epicentros animados, o lo que nosotros hemos etiquetado como tierras de animación, casi siempre se piensa en las grandes urbes que concentran estudios, festivales e instituciones educativas enfocadas en la celebración de este arte. Pero a veces, y solo a veces, surgen curiosas anomalías, siendo nuestras industrias responsables de una de las más sorprendentes: la de Almendralejo con The Glow.

La casa productora, fundada en el año 2010 por José María Fernández de Vega, no solo ha puesto a esta ciudad extremeña de menos de 35.000 habitantes en el mapa animado, sino que la ha posicionado en lo más alto. Todo esto mediante una compleja estrategia sustentada en la producción, pero también en la importancia de crear y promover la industria en todos los rincones de España y del mundo.

Que las iniciativas sean un éxito rotundo no es casualidad. Es, más bien, una prueba de la comprensión del arte y la industria por parte de los involucrados. Es también un desafío a los modelos más convencionales, bajo la premisa de que la pasión animada se respira en todos los sitios.

Buñuel, un sueño y un estudio que sorprendió al mundo

Uno de los aspectos más poderosos de Buñuel en el laberinto de las tortugas, novela gráfica inspirada en hechos reales en la que Fermín Solís especula sobre el rodaje del documental Las Hurdes: tierra sin pan, es cómo exalta los esfuerzos del cineasta Luis Buñuel y el productor Ramón Acín por “cambiar las cosas” desde el cine. También, cómo plasma las necesidades artísticas llevadas al extremo desde la realización de lo impensable, con el realizador llegando hasta las últimas consecuencias para concretar la obra como siempre la imaginó.

Podría decirse que el destino quiso que las exploraciones audiovisuales de esta obra se alzaran como los pilares fundamentales de Glow, lo que incluye un corto, un largo y un documental centrado en la producción de este último. Lo cierto es que fue la visión de Fernández de Vega la que luchó para que el entonces modesto estudio extremeño llevara a la pantalla la historia que mostraba al primer gran director español de todos los tiempos durante su rodaje por Extremadura. No solo eso, sino que “lo que queríamos era compararnos con los mejores”.

Para ello, se reclutó a un equipo que combinaba talentos consolidados y emergentes como Salvador Simó, Elizabeth Castro, José Luis Ágreda, Pablo Ruiz y Pilar Díaz, muchos de los cuales debieron trasladarse a la pequeña ciudad para la producción. La empresa tomó por sorpresa a la industria, como demostró el director de animación Manolo Galiana al bromear sobre cómo debió tomar un mapa para buscar el lugar antes de sumarse a la producción. Fue así como nació The Glow Animation Studio.

El éxito de Buñuel en el laberinto de las tortugas es equiparable al de fenómenos recientes como Pinocchio de Guillermo del Toro, y Robot Dreams de Pablo Berger. Su impresionante palmarés incluye el Goya, el European Film Award, el Premio del Jurado en Annecy, el Premio Platino y una nominación a los Annie Awards. También fue uno de los tres títulos considerados para representar a España en la carrera por el Oscar internacional 2020, que finalmente fue para Dolor y gloria de Pedro Almodóvar.

Su público ha sido diverso, pues además de su paso por las pantallas, el streaming y la televisión, ha participado en diversos ciclos cinematográficos para audiencias de todas las edades. Incluso los Reyes de España pudieron disfrutar de una exposición de paneles que detallaban la realización del proyecto durante su visita a Pinofranqueado, con motivo del centenario de la visita de S. M. el Rey Alfonso XIII a la comarca de Las Hurdes.

Desde entonces, The Glow Animation Studios ha construido una espectacular filmografía que incluye algunas de las obras animadas más importantes del panorama contemporáneo. En el formato corto sobresalen títulos como Operación Frankenstein de José María Fernández de Vega, Medea a la deriva de Mary Cruz Leo, O Estado de Alma de Sara Naves y El corto de Rubén de José María Fernández de Vega, que combina animación con imagen real; en el terreno del largo figuran El sueño de la sultana de Isabel Herguera y la próxima Decorado de Alberto Vázquez, que tiene todo para ascender como uno de los grandes éxitos de nuestras industrias.

Trabajar el presente para forjar el futuro

La animación es cine. The Glow Animation Studio lo sabe y así lo demuestra con cada una de sus obras, pero también con una serie de esfuerzos que van más allá de la pantalla y se dirigen hacia distintos sectores de la industria, como el impulso de nuevas producciones con la Factoría de la Animación y el Videojuego. Creada en 2024, la iniciativa ya da sus primeros pasos con la aceleración de dos proyectos de máxima trascendencia que prometen ser decisivos para el desarrollo de la industria extremeña.

El primero es All Good, proyecto de serie creada por Diego Porral y Joaquín Garralda, dupla responsable de Leopoldo el del bar, y que luego de pasar por eventos como Weird Market, Cartoon Springboard y Annecy, se decanta por Almendralejo para ultimar el desarrollo de su alocada exploración del burnout laboral.

El segundo es un videojuego desarrollado en colaboración entre el estudio PixelRatio y Borja González, ganador del Premio Nacional del Cómic 2023 por su impresionante trabajo en Grito nocturno. Los detalles son una incógnita, pero la alianza ha disparado las expectativas por todo lo alto, tanto por el talento de los involucrados como por la unificación de artes como el cómic y el videojuego.

Más allá del desarrollo de nuevos contenidos, The Glow también ha apostado por formar públicos que valoren las cualidades del arte animado. Es así como surge el Festival FPS, que en menos de cinco años ha generado un enorme interés con su programa que combina la proyección de cortos y largos con pláticas impartidas por algunos de los principales referentes de la industria animada iberoamericana. Para entender la magnitud, basta decir que por sus micrófonos han pasado figuras como Alberto Vázquez, Isabel Herguera, José Luis Ágreda, Eva Pérez Misa y Nuno Beato, entre otros.

 

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Los nombres impactan, pero lo verdaderamente significativo es que la presencia de estos y otros artistas no se limita a sus charlas, pues se trata de un evento de carácter intimista que ha sido ideado para fomentar la cercanía con el público. Este está integrado en buena medida por artistas en formación, que de este modo tienen una oportunidad inmejorable para conversar con quienes han forjado algunos de los mayores logros animados de la región.

Esa apuesta por el presente convive con una visión clara hacia el futuro, ya que el estudio también participa activamente en iniciativas académicas entre las que sobresale The Glow Academy. La idea nace en 2023, tras una serie de acercamientos por parte de numerosas personas interesadas en adentrarse en el arte animado, y destaca por su innovadora estrategia que permite aprender en el mismo estudio, con clases impartidas por sus artistas y un modelo flexible que permite a las personas elegir los módulos que necesiten.

El esfuerzo apunta a convertirse en un importante semillero de talentos, cuyos frutos contribuyan a la fortificación de la industria extremeña y repercutan de lleno en toda España y el resto de la región iberoamericana.

Lo que comenzó como un sueño en una pequeña ciudad extremeña hoy es una realidad que inspira a toda una región. The Glow Animation Studio no solo hace arte, sino que construye futuro, comunidad y oportunidades desde el corazón de Almendralejo. Porque la animación, como la creatividad, no tiene fronteras.