Soy Frankelda ya hizo historia para la animación iberoamericana como el primer largometraje totalmente mexicano realizado en la técnica stop motion. Sin embargo, los hermanos Arturo y Roy Ambriz no se conforman y continúan apuntando alto con un filme que no conoce límites.

Estrenada en cines el pasado 23 de octubre, se contempla que la película supere los 500 mil asistentes en el transcurso de esta semana, consolidándose así como uno de los mayores éxitos de la animación mexicana contemporánea y reafirmando el poder de la imaginación hecha a mano en México.

De momento, ya es la quinta película mexicana más vista del año. No conforme con esto, también figura en el top 15 histórico de taquilla de animación mexicana. Un listado de 52 títulos en el que recientemente superó a un clásico contemporáneo como Ana y Bruno, de Carlos Carrera [vía].

Sus logros van más allá de la pantalla. La exposición Frankelda: Creación y pesadillas, que se alberga en la Cineteca Nacional México, ha recibido a más de 17,500 asistentes en tan solo cuatro semanas. Estas impresionantes cifras prometen crecer todavía más durante los próximos meses, recordando que la exhibición estará abierta al público hasta el 6 de enero.

La muestra —presentada por HBO Max, con el apoyo de COMEX y CTT Exp & Rentals— reúne más de 120 marionetas, 20 sets originales y material inédito de la película, invitando a los visitantes a descubrir el arte detrás del fenómeno que ha conquistado a audiencias de todo el mundo. Más importante aún, deja claro a todos los asistentes que la animación es arte.

Y esto es solo el inicio. El equipo de Cinema Fantasma siempre ha dejado claro que Frankelda todavía tiene mucho margen de expansión. De momento, toca disfrutar y apoyar: el éxito de esta y otras producciones de animación iberoamericana también depende de todos nosotros.