La carrera por el Oscar ha comenzado y la animación iberoamericana vuelve a hacerse presente con una cosecha dotada de un altísimo nivel. Una que además nos pone a soñar con el presente y el futuro de nuestras industrias, ya que incluye cineastas consolidados y jóvenes que dan sus primeros pasos, todos ellos dotados de grandísimas cualidades.

La longlist de títulos iberoamericanos está compuesta por diez cortometrajes: An Almost Christmas Story (Dir. David Lowery, EEUU, México), Ana Morphose (Dir. João Rodrigues, Portugal), In the Stars (Dir. Gabriel Osorio, Chile, EEUU), La perra (Dir. Carla Melo, Colombia, Francia), Mello’s Funk (Dir. Eric Towner, Mike Roberts, EEUU, Argentina, España, México), Nube (Dir. Christian Arredondo, Diego Alonso Sánchez de la Barquera Estrada, México, Francia, Hungría), Percebes (Dir. Alexandra Ramires, Laura Gonçalves, Portugal, Francia), Remember Us (Dir. Pablo León, Guatemala, Colombia, EEUU), Tapir Memories (Dir. Pedro Nel Cabrera, Colombia, Suiza) y To Bird or Not to Bird (Dir. Martín Romero, España). Todos lograron su plaza tras coronarse en los distintos festivales calificadores o al cumplir con otras reglas de preselección. Todos son ganadores desde ahora.

¿Cómo fue el camino para llegar al Oscar y qué se necesita para hacerse con el galardón? ¿Cómo se nivela la balanza entre la libertad creativa y los presupuestos? Más importante aún, ¿cuáles son las virtudes que han colocado a la animación iberoamericana en lo más alto de este y otros encuentros cinematográficos de clase mundial?

Para responder a estas y otras preguntas, Radix reunió a nueve de los cineastas que intentarán dar al bloque su tercer triunfo en la terna a Mejor cortometraje de animación: los portugueses Laura Gonçalves, Alexandra Ramires y João Rodrigues, los colombianos Carla Melo y Pedro Nel Cabrera, los mexicanos Christian Arredondo y Diego Alonso Sánchez de la Barquera Estrada, el guatemalteco Pablo León y el chileno Gabriel Osorio, quien dicho sea de paso, es responsable del primer Premio de la Academia para nuestras industrias por Historia de un oso. ¡Un encuentro histórico que ningún amante de la animación debe perderse!

Desde Radix le deseamos la mejor de las suertes a todos nuestros representantes en el Oscar 2025.