Resulta curioso recordar que Lulina e a Lua, flamante ganador de los Premios Quirino a Mejor cortometraje de animación, realmente nació de la idea de una serie. El proyecto gozó de un desarrollo importante, pero nunca pudo concretarse por los cambios en las políticas culturales de Brasil y la evolución propia de una industria que apuntaba cada vez más al streaming. Pero no murió, ya que los directores Marcus Vasconcelos y Alois Di Leo contemplaron el modo de adaptar su formato, ya fuera con un largo o un corto, para finalmente decantarse por esta última opción.

En muchos casos, la historia terminaría aquí, pero la dupla realizadora siempre ha sabido que Lulina todavía tiene mucho por contar. O mejor dicho, por dibujar. Esto, aunado a los estupendos resultados de la obra ha motivado al equipo a expandir esta aventura por los terrenos del largometraje. Así nos lo confesaron sus integrantes en los Premios Quirino 2024.

“En principio estamos enfocados en el largo”, nos confesó Marcus Vasconcelos. “En realidad, el corto fue como una prueba de concepto del largo, porque creemos que en el largo hay una mirada donde se puede expresar todo lo que pensamos que es Lulina hoy. Pero sin duda hay espacio para hacer una serie. Lo que pasa es que en una serie es más difícil pensar algo que tenga este cuidado estético porque hay una presión más grande del mercado, los presupuestos son más chicos. No descarto la posibilidad, pero hoy estamos trabajando para hacer el largo una realidad”.

Al respecto, Alois Di Leo complementa al explicar que “de cierta forma el largometraje le hace justicia a la historia. Puedes realmente desenvolver las emociones, el arco, traer toda la magia. Darle un espacio seguro para que Lulina viva eso, sin grandes conflictos, sin grandes miedos. Miedos externos, digamos, pues todo lo que siente viene de ella”.

Ya lo dijimos en su momento: el futuro es un lienzo en blanco y nuestra tierna protagonista no deja de pintar. Una premisa que hoy resuena con más fuerza que nunca. De momento el proyecto está en desarrollo y no tiene un calendario bien establecido, pero la noticia nos pone a soñar con todas las posibilidades que podrían surgir de esta iniciativa.

Lulina e a Lua cuenta la historia de una pequeña amante de la pintura que aprovecha su pasión para plasmar todas sus alegrías y sus emociones. Con la luna convertida en una enorme hoja en blanco, su arte se convertirá en la mejor forma de enfrentar una serie de dudas que le aquejan ante un inminente cambio en su vida.

Próximamente nuestra entrevista completa.