Crítica: Chica Cartón
Chica Cartón refleja perfectamente los continuos sinsabores de la vida, pero también invita a siempre seguir adelante.
12 de julio de 2023Por Luis Miguel Cruz
“La vida tal vez es una acumulación de rendiciones”, asegura Mi en uno de sus numerosos tropiezos a lo largo del día. La joven padece en su momento, pero nunca pierde la sonrisa ni mucho menos la esperanza de que al final del día todo saldrá bien. Esta única secuencia sería suficiente para que Chica Cartón llamara nuestra atención, pero lo cierto es que es sólo una de las numerosas riquezas de una serie tan divertida como crítica gracias a su capacidad para reflejar los retos enfrentados por una optimista empedernida en una existencia que no se cansa de impartir golpes de realidad.
La serie nos introduce con una chica de 17 años recién llegada a la gran ciudad. Son muchas las historias que parten de este mismo punto, pero muy pocas las que lo hacen con tanta autenticidad. De hecho, es justo decir que esta es la base una construcción sustentada en una serie de opuestos que resultan en un personaje atractivo e inusual.
Hablamos de una protagonista independiente pero sumamente inmadura, lo que puede apreciarse en prácticamente todos los aspectos de su existencia. No tiene trabajo y por consiguiente, carece de ingresos; su nevera está vacía y tiene una franca debilidad por la comida chatarra; su casa está sucia y no tiene una sola prenda limpia; y sobre todo, tiene serias dificultades para definir su identidad.
También es una chica que sabe mucho, pero a la vez muy poco. Mi aprovecha cada ocasión para compartir toda clase de datos curiosos que no son de gran ayuda para superar las peripecias de su existencia. Peor aún es que este exceso de información no se traduce en la acción, pues aunque es consciente de muchas de las cosas que están mal en el mundo, los deseos por sobrellevar su existencia terminan convirtiéndose en imitación de tendencias y en desidia. Al menos hasta que decide que es momento de cambiar.
Y es que Mi, como ya dijimos al inicio de esta crítica, también es una persona convencida de que las cosas buenas llegarán, una característica difícil de mantener ante los recurrentes pesares que padece. Esto hace que cada desencanto resulte especialmente doloroso, más aún ante el aura de negatividad de tantas personas que se entrecruzan en su camino, pero también le dará la fuerza necesaria para levantarse en cada ocasión para seguir adelante en busca de un nuevo sueño.
Porque contrario a lo que algunos podrían suponer, Chica Cartón no es una historia que invita a pensar que todo lo malo sucederá, ni que como insiste el cerebro de nuestra protagonista, “tienes lo que te mereces”. Todo lo contrario, es una serie que refleja los continuos sinsabores de la vida, pero que invita a siempre seguir adelante. Un mensaje que especialmente trascendente ante su certera representación de una juventud que batalla cada vez más por encontrarse ante las comodidades y exigencias del mundo actual.
La producción también sobresale en sus apartados técnicos, empezando por su diseño de personajes. Fiel al estilo que caracteriza a Adaan Li Guampé y Alei Valet Siv, aunque dotados de elementos muy propios que los hacen únicos y que sacan a relucir el valor de la caricaturización.
A esto se suman las sutilezas de los pequeños detalles, perceptibles desde la primera exhibición y verdaderamente disfrutables en los revisionados. Esto incluye el manejo de color conforme a la situación que enfrenta nuestra protagonista y el desgaste mostrado por muchas de sus pertenencias. Mención aparte para la extraña apariencia de los personajes incidentales que invita a pensar que somos lo que consumimos. También para los incontables rostros ocultos en cada uno de los cuadros y que enfatizan la sensación de que nuestras decisiones son juzgadas por las personas que nos rodean.
Chica Cartón tiene lo necesario para resonar con fuerza entre el público adolescente al que va dirigida, pero sobre todo, es una serie capaz enamorar a cualquiera que haya soñado y tropezado. Una serie que invariablemente nos invita a pensar que, sin importar los desencantos y obstáculos en el camino, lo mejor siempre llegará si nos aferramos a ello.
Ficha técnica
- Título Chica Cartón
- Dirección Adaan Li Guampé, Alei Valet Siv
- Año 2023
- País Colombia
- Técnica 2D
- Voces Agustina Cirulnik, Isabel Martiñon
- Disponible en RTVC