Conoce All Good: La sitcom que refleja la crisis del burnout
Diego Porral y Joaquín Garralda profundizan en su proyecto de serie 3D con el que se mofarán de los incontables problemas surgidos en los entornos laborales.
28 de noviembre de 2023Por Luis Miguel Cruz
Burnout. Un estado de agotamiento emocional, físico y mental provocado por un estrés excesivo y prolongado. Ocurre cuando las personas se sienten abrumadas, emocionalmente desgastadas e incapaces de satisfacer demandas constantes. Siempre ha estado presente, pero no ha sido sino hasta estos últimos años que la sociedad ha empezado a verlo como un problema, consecuencia de una existencia que se torna cada vez más demandante ante los trabajos que nos consumen como individuos. La palabra, que tantos debates ha generado, ahora es aprovechada como pilar de All Good, proyecto de serie encabezado por Diego Porral y Joaquín Garralda, responsables del multilaureado cortometraje Leopoldo el del bar.
Si nos ponemos prácticos, All Good, nacida bajo el título de Manolitos, puede ser descrita como una comedia en animación 3D, en un formato de 12 episodios de 20 minutos y que recurre al formato sitcom para hablar del burnout laboral. Esto ya sería suficiente para capturar nuestra atención, pero el verdadero enamoramiento con la obra llega de los detalles que la dupla nos comparte al por mayor.
La trama nos adentra en Desatascos García, una empresa familiar como muchas en el mundo, pero con la peculiaridad de que ésta se especializa en desatascos de fosas sépticas. Es así como conocemos a nuestro protagonista Simón González, a quien Garralda describe como “una persona racional, asentada con los pies en la tierra y un optimista que intenta ser mejor cada día”. Un individuo enamorado de su trabajo y quien hace todo lo posible por ejecutarlo con la responsabilidad que merece. En otras palabras, un trabajador ejemplar, hasta que los continuos absurdos propiciados por todos los que le rodean al interior de la empresa le hacen explotar. Es precisamente así como todo inicia, con el empleado en terapia y haciéndolo todo con el fin de regresar al sitio de sus amores.
El proyecto se encuentra en sus primeras etapas, pero la dupla ya tiene bien claros cuáles serán los argumentos de muchos de los episodios. Sin embargo, ambos son conscientes de que el éxito de las sitcoms no radica en las tramas sino en los personajes. Por eso han concebido una muy rica baraja de empleados que pondrán la oficina de cabeza en más de una ocasión.
El catálogo es encabezado por el jefe Fermín, una rana que hereda la compañía sin tener la más mínima idea de administración ni de desatascos, pero que aun así se ve a sí mismo como una figura sumamente influyente entre los suyos. “[Se considera] una figura como Elon Musk que va a inspirar a las nuevas generaciones y en realidad lo que pasa es que es un pesado que se distrae con una facilidad tremenda, con lo cual va a intentar cambiar de objeto de misión y de visión todas las semanas”, explica Joaquín Garralda, “Es un mal que te tienes que comer porque es tu jefe y va a ser una de las grandes fuentes de desesperación de González”. La lista de empleados también incluye un becario extrovertido que causa fascinación a pesar de su irresponsabilidad; una llama psicóloga cuya actitud calmada contrasta con su naturaleza animal que la hace escupir, comerse las plantas de al lado, y más; y un hongo tan viejo que ya estaba con el edificio, lo que le motivó a trabajar ahí.
En primera instancia, podría pensarse que la principal fuente de inspiración es The Office, pero los responsables nos confirman que realmente es Community por la manera en que incorpora las situaciones más disparatadas a la trama. También hay bases animadas, como sería el “humor con mucha acción, bastante rápido” de The Amazing World of Gumball y SpongeBob SquarePants. Sin embargo, el principal pilar viene de las oficinas a las que Diego Porral considera “un campo de cultivo tan básico y que todo mundo entiende. De ahí podemos partir y hacer aventuras completamente locas”, mientras que Joaquín Garralda las describe como “un lugar súper interesante para entender las dinámicas entre grupos porque hay una jerarquía, relaciones de poder, conflicto y la vez todo el mundo tiene que jugar un rol de estar en control, de saber lo que hace proyectarse a sí mismo como profesional”.
Es difícil saber si los orígenes de esta historia son resultado de una genialidad o si son consecuencia del propio agotamiento padecido por ambos artistas tras el exitoso, pero largo recorrido del cortometraje Leopoldo el del bar que les llevó hasta la calificación del Oscar, al tiempo que les demostró lo desafiante que era sacar proyectos propios. Quizá tengan un poco de ambas, pero de lo que sí estamos seguros es que son hilarantes.
“Cuando estamos un poco cansados el uno del otro”, rememora Joaquín Garralda entre risas, “le pedí a Diego que quería como guionista un poco más de metraje. Quería seguir creciendo y le pedí un reto. Le propuse que cada semana le tenía que enviarle un pequeño guion de lo que fuera y si no, tenía que donar dinero a lo que sea”. La causa no podía ser verdaderamente benéfica, recuerdan los creativos, ya que esto no provocaría pesar en el escritor. En vez de ello se decantaron por un absurdo como fue Tall People of America que apoya a las personas altas en los Estados Unidos a sobrellevar su estatura. “Lo más divertido es que el baremo de altura es súper accesible, el de chicos es de 1.88 y el de chicas es de 1.80”, comparte el artista con una sonrisa al tiempo que bromea sobre cómo “hay fotos mías en casas de un americano ligeramente más alto que la media” al recordar los donativos realizados.
“Es muy raro leer guiones y reírse, pero es lo que me pasó”, complementa Diego Porral. “Después de Leopoldo me había prometido no hace cortos una temporada, estaba muy quemado, necesitaba descansar. El tercer o cuarto guion que me envío fue este, lo leí y fue como… ¡ahora quiero hacer esto! Era muy gracioso, después entramos a desarrollarlo y no podíamos dejarlo ahí porque el universo empezó a crecer y crecer”. Más allá de la emoción, lo expuesto resultó en una inyección de motivación para el cineasta. “Cuando acabó Leopoldo yo estaba quemado, pero la pasé irreal. Aunque estuviese cansado, rápidamente se me olvidaron los últimos meses porque recordé los buenos momentos. A veces estás inspirado y tienes ideas y no puedes dejar de pensar en eso y es un poco lo que ocurrió con este guion”.
Esta fascinación no se limita a los creativos, sino que se extiende a las audiencias en cada pitch realizado hasta ahora, lo que incluye foros como Weird Market, Animac, Next Lab, Cartoon Springboard y el Festival Internacional de Cine de Annecy. De acuerdo, sabemos que buena parte del atractivo de estas presentaciones es que Joaquín ha realizado muchas portando un disfraz de rana, una alocada tradición que empezó con las charlas de Leopoldo el del bar en que aparecía como palomo. Sin embargo, el verdadero encanto radica en la identificación que genera.
“Refleja a una gran mayoría de la sociedad”, reflexiona Diego Porral. “Es un gran problema de nuestra generación. Hay una gran desilusión por el trabajo, estamos tan acostumbrados a obtener todo tan rápido y el trabajo que no se puede apresurar. Hay un choque de realidad y creo que va a encajar muy bien con esta generación”. Por su parte, Joaquín Garralda piensa que “todo mundo tiene un González dentro y todo mundo siente que esta lidiado con esa realidad imperfecta, loca y esa gestión de expectativas cuando de repente todo lo que se suponía que iba a ser no es”.
Pero no nos pongamos dramáticos, que si bien All Good promete suscitar todo tipo de reflexiones sobre los entornos laborales, el guionista del show asegura que “no queremos ser moralistas, queremos hacer una serie que tenga muchas capas. Vamos a llevar a los personajes a situaciones que sean ricas, no es simplemente humor por humor, no va a ser un gag gratuito, sino que le estamos intentando dar un poco de cuerpo a todo esto”.
La confianza es máxima. No sólo en la narrativa, sino en su desarrollo. Así lo confirman ambos en la posición de showrunners que ambicionan, en la búsqueda del mejor equipo e incluso en su evolución profesional. Así lo demuestra Porral al asegurar que su reciente labor en producciones como Spider-Man: Across the Spider-Verse y Scavengers Reign le ha dado “experiencia de liderar, de cómo manejar equipos. Cuando estábamos con Leopoldo me sentía muy inexperto, pero ahora que trabajo en más roles de supervisión y de dirección me siento con confianza de poder hacer nuestra propia serie y saber cómo proyectar mi visión”.
Los artistas son conscientes de las enormes posibilidades narrativas de una producción de este tipo y así lo demuestran al recordar continuamente que las sitcoms tienen un carácter virtualmente inagotable. A pesar de esto, de los halagos recibidos y de las altas expectativas, prefieren no precipitarse e ir paso a paso en el desarrollo del proyecto. “Cualquier creador con el que hables tiene ideas de largos, de series y de cortos. Es precisamente lo que hacemos, tener ideas. Lo difícil es aterrizarlas y que salgan y todavía más en animación”. Dicho esto, la siguiente escala en esta aventura es la realización de un teaser que seguramente aumentará todavía más el deseo de ver esta serie que parece tenerlo todo para triunfar.