Crítica: Llueve
Un poderoso corto documental animado que exige respuestas ante la crisis de desaparecidos en México.
29 de julio de 2022Por Luis Miguel Cruz
¿Dónde están? se ha tornado en una de las preguntas más recurrentes y dolorosas en México. Un país en el que cada día aumenta exponencialmente la lista de desaparecidos sin que las autoridades tomen cartas en el asunto. En vez de ello, la sociedad ha tomado la responsabilidad desde diversos frentes como campañas y manifestaciones. Pero también con audiovisuales de todo tipo que se han convertido en un importante canal para alzar la voz. Tal es el caso de Llueve.
Su naturaleza documental nos acerca al secuestro y asesinato de Óliver Wenceslao Navarrete Hernández ocurrido en mayo de 2013, pero sobre todo al calvario enfrentado por su madre cuando el cadáver, cedido temporalmente al servicio médico forense para la investigación del caso, es sepultado en una fosa común. Lejos de ceder a las recomendaciones de las autoridades, que sugieren dejar tranquilos los restos para que el joven descanse, la fémina inicia una cruzada en busca de paz y de justicia. Una historia que ya es suficientemente impactante por sí sola, pero cuyo mensaje cobra aún más fuerza por sus bases animadas.
En el papel, el corto de Carolina Corral Paredes y Magali Rocha Donnadieu podría catalogarse como un complemento, quizá incluso como una precuela, del documental de acción real Volverte a ver (2020) que fuera dirigido por la propia Corral. Esto, sin embargo, sería injusto para un título que tiene vida propia y unos objetivos muy específicos que sólo pueden ser alcanzados desde la animación.
Como tantos otros documentales de este tipo, Llueve se respalda en la técnica para facilitar el acercamiento con la audiencia desde una narrativa que puede resultar más asequible en muchos aspectos, aunque no por ello menos cruda o relevante. Esto incluye el tratamiento de elementos simbólicos, tan íntimamente asociados a la ficción y por consecuencia tan alejados del género más realista por excelencia. En el caso concreto de este film, es precisamente la lluvia la que asume este rol al ser una especie de vía de comunicación entre la víctima y su madre, siendo así un llanto de tristeza por la pérdida, pero también de esperanza ante la posibilidad de que ese dolor pueda tener consecuencias positivas para tantos afectados.
Caso similar al diseño de arte a cargo de María Conejo que se decanta por un blanco y negro extremo, invertido además en algunos de los momentos más extremos del corto, como si de un negativo fotográfico se tratase. Una decisión estética que apela directamente a una nación sin rumbo en donde las cosas parecen operar a la inversa, con las autoridades tomando decisiones francamente cuestionables y que exigen respuestas inmediatas.
Finalmente se ha de destacar que su poderío no se limita a la animación. Se respalda en una buena edición que incorpora material de archivo en los momentos justos para reforzar la trama desde el realismo. Una decisión acertada desde una dirección sabedora de que algunas cosas deben abordarse desde el realismo puro y duro.
Llueve, más que un cortometraje documental, es una invitación a la solidaridad con tantas familias que han sufrido la desaparición de un ser querido a través del tiempo; un llamado a informarse sobre las incontables desapariciones ocurridas en México desde hace años; un grito que exige respuestas. No tanto al caso de Óliver, sino a las incontables anomalías de un sistema fallido. Es, finalmente, una prueba más del poder narrativo de la animación que se ha convertido en uno de los métodos más efectivos para encontrar la verdad. Incluso aquellas que puedan resultar más dolorosas.
Ficha técnica
- Título Llueve
- Directoras Carolina Corral Paredes (Volverte a ver), Magali Rocha Donnadieu (ópera prima)
- Año 2021
- País México
- Técnica 2D
- Voces originales Mariana Villaseñor