Pedaleando sin parar: proyecto de pedagogía rock sobre el estilo de vida en bicicleta
Amistad, gusto por la bicicleta y conciencia sobre el cambio climático son los ejes principales del proyecto musical animado.
4 de septiembre de 2024Por Agencia
La animación ha demostrado ser una importante aliada en la lucha contra el cambio climático. Desde Colombia, un nuevo título se suma al esfuerzo, Pedaleando sin parar, un proyecto de pedagogía rock creado por Leo Vinz que profundiza en el estilo de vida en bicicleta. El músico funge como creador y productor, además de compositor e intérprete de la banda sonora, mientras que la dirección corre a cargo de Sofía Martinich bajo la producción de Piragna.
El proyecto arranca con un videoclip animado que sirve como carta de presentación. Es así como conocemos a Debi, un oso polar que inesperadamente se muda a Bogotá, es el protagonista de esta historia. Es ahí donde conoce a Yeli, una rana dorada panameña que, como el oso polar, está en peligro de extinción. Es así como ambos inician un recorrido en bicicleta por una Bogotá marcada por los contrastes y en la que tendrán que adaptarse a una compleja realidad.
“Él llega de un lugar remoto, no conoce la dinámica de la ciudad, ni sabe concretamente sobre la causa que hace que su hogar en el polo norte esté teniendo transformaciones, pero mientras avanza la historia podemos ver la evolución de Debi porque toma conciencia e identifica qué aspectos puede mejorar del mundo y toma acción para hacerlo”, dice el creado Leo Vinz, quien, además de músico, se prepara para debutar como guionista de cine y escritor de libros.
El lanzamiento de Pedaleando sin parar está programado para el 6 de septiembre en el marco del Día Internacional del Aire Limpio por un Cielo Azul. De acuerdo con Naciones Unidas, este día se celebra con el objetivo de “asumir la responsabilidad de proteger la atmósfera del planeta y garantizar un aire sano para todos”. Ese ‘todos’ no sólo se refiere a los seres humanos, sino también a los integrantes del reino animal y vegetal, quienes igualmente sufren las consecuencias de la transformación del ecosistema por las altas temperaturas o la escasez de agua.
Con este contexto, nuestro protagonista Debi es obligado a migrar de su hogar en el Ártico para establecerse en Bogotá, una ciudad en la que debe conseguir su primer trabajo, pero como no tiene los años de experiencia necesarios para postularse, no tiene otra opción que aceptar trabajar como domiciliario; una situación que viven muchos jóvenes recién egresados y migrantes.
La canción Pedaleando sin parar fue escrita hace varios años, cuando el artista Leo Vinz estudiaba en la Universidad Nacional y se transportaba todos los días en bicicleta, una actividad que sigue siendo fundamental en su proceso creativo. En su transición al videoclip animado, el espectador recorre junto a Debi y Yeli algunos lugares icónicos bogotanos y es testigo de cómo este oso polar se sobrepone a las adversidades y aprende a disfrutar la ruta en bicicleta.
“Debi nos sumerge en una Bogotá imponente, gris, con tonos azulados y contrastes que la caracterizan. Los cerros acompañan su viaje en bicicleta, mientras él descubre la ciudad y se deja atrapar por ella. Quisimos retratar una atmósfera fría y un poco ruda, con un clima ambivalente, como en muchas ocasiones la sienten los forasteros que vienen buscando una nueva vida con ojos de esperanza. Desde el Park Way, los altos edificios del centro, hasta las típicas casas de barrio con sus particulares rejas y puertas fueron inspiración para darle vida al universo de Pedaleando sin parar”, comenta la directora Sofía Martinich.
Pedaleando sin parar no es sólo la historia de un personaje que monta bicicleta, sino un proyecto de “pedagogía rock” porque “en el fondo se trata de pedalear por los sueños, es la actitud con la que se enfrenta la vida. Es un homenaje a la vida juvenil y a la amistad que puede ayudar a tener propósitos comunes y lograr sueños en conjunto”, concluye el creador Leo Vinz.