La violencia contra la mujer tiene muchas caras. Así lo recuerda Carmen Córdoba con su tercer cortometraje, Pinchu es así, que plasma aquella que no deja marcas visibles, pero sí muy profundas, en tantas féminas alrededor del mundo. Un mensaje poderoso cuya fuerza sale a relucir desde el trailer.

No es casualidad que el avance fuera liberado en pleno Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Hablamos de una obra que, como nos comparte la propia realizadora, “no solo habla de la violencia de género, sino de nuestra responsabilidad colectiva: de cómo todas y todos, por costumbre, presión social o incluso por afecto, podemos llegar a justificar a quienes agreden. Este corto quiere confrontarnos con nuestra complicidad y recordarnos que cambiar esta realidad está en nuestras manos”.

La trama pone el foco en el personaje titular, un guarrete a quien todos le ríen la gracia, incluida su novia Jimena. Solo Bea es capaz de verlo sin filtros, tal y como es, aunque quizá esa experiencia traumática la obligue a plantearse si ella no estará justificando de la misma forma el comportamiento de un ser muy querido.

Siempre fiel a la narrativa altamente intimista, la historia nace de experiencias personales, que en este caso, son abordadas desde el humor. Una selección de género interesante, ya que enfatiza la normalización del problema por parte de la sociedad, al tiempo que exalta las sensaciones de malestar surgidas de la grotesca estética.

Pinchu es así estrenó exitosamente durante la Semana del Cortometraje de la Comunidad de Madrid, pero el debut oficial del trailer puede verse como una presentación simbólica de la obra ante los ojos del mundo. También como un pistoletazo de salida rumbo a un recorrido festivalero que promete dejar muchas satisfacciones, pero, más importante aún, muchas reflexiones en torno a los temas que trata.