Juan Padrón, creador de Elpidio Valdés y director de ¡Vampiros en La Habana!, es una de las mayores leyendas en toda la historia de la animación iberoamericana, lo que hace que la preservación de su obra sea un tema urgente. Una iniciativa que ya es trabajada bajo el nombre de La Manigua y que es encabezada por la hija del mítico artista, Silvia Padrón.

“Mi papá siempre tuvo el dolor de que su obra estaba archivada como él había podido”, recuerda en entrevista con EFE. “Cuando falleció [en 2020] me tracé la meta de rescatar al menos la mayor parte, que ya estaba aquí en la casa”.

El plan consiste en la digitalización de la obra que la familia tiene en su posesión. La iniciativa se llevará a cabo en Cuba, pero contará con el invaluable apoyo técnico y económico de la embajada de Alemania en Cuba a través de un programa de conservación cultural que facilitará todo el equipo necesario.

De momento, el proyecto se encuentra en su primera etapa que consiste en la organización de todo el archivo. Un reto mayor al tratarse de un artista sumamente fructífero y cuya trayectoria se extendió por más de 40 años. Al respecto, Silvia Padrón confiesa que “no tenemos idea de la cantidad de documentos que tenemos aquí. Estamos justamente haciendo el inventario para saber lo que hay. Lo organizaremos en un catálogo y luego pasaremos a digitalizarlo”.

De acuerdo a la calendarización, se espera que esta fase inicial concluya entre junio y julio. La totalidad del proyecto, por su parte, debe culminar en diciembre de este mismo año. ¿Y después? La obra de Juan Padrón estará disponible en una plataforma online donde podrá ser consultada por especialistas y todos aquellos interesados en la obra del cineasta cubano. Los detalles sobre este sitio aún no han sido revelados.

La digitalización de la obra de Juan Padrón es una iniciativa que debe celebrarse. Porque reconoce el gran legado del realizador y el invaluable valor artístico de su trabajo. También porque cumple un viejo sueño del creativo, cuya obra finalmente será preservada como se merece. Un esfuerzo para la historia que garantizará que las generaciones venideras puedan disfrutar de la genialidad de un titán de nuestras industrias.