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Entrevistas

René Castillo: «Hay un encanto especial en el stop motion»

El director, escritor y productor rememora su carrera al tiempo que comparte el estatus de sus próximos proyectos.

6 de septiembre de 2022
Por Luis Miguel Cruz
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Hoy día, es común escuchar que el uso del stop motion se ha disparado en Iberoamérica, siendo México uno de los países en los que la técnica se manifiesta con más fuerza. Más que un producto de la casualidad, esto es resultado de una larga tradición al interior de su industria, siendo René Castillo un elemento fundamental para que esto sucediera.

El creativo mexicano incursionó en la industria animada casi de manera fortuita, pero no pasó mucho tiempo para que la pasión le envolviera. Su carrera realizadora, al menos hasta ahora, es relativamente corta. Poco importa la cantidad, ya que la calidad de sus proyectos es tan alta que le ha valido su paso a la historia, dotado además de un estatus cuasi mítico.

No es para menos. Su corto debut, Sin sostén (1998), fue galardonado por cerca de diez certámenes. Le siguió Hasta los huesos (2001) que obtuvo más de treinta reconocimientos nacionales e internacionales, entre los que destaca el premio a mejor cortometraje de animación en el Festival Internacional de Animación de Annecy.

Ambos proyectos sobresalen por una identidad muy propia. En lo estético con una técnica francamente artesanal y el marcado uso de claroscuros. También en lo temático con francas exploraciones de la vida, la muerte y los placeres que rigen nuestra existencia.

Aunque con el tiempo trasladó buena parte de su energía al campo publicitario, René Castillo nunca dejó las artes audiovisuales. Buen ejemplo de ello es Thingdom, que marcará su espectacular regreso a la pantalla y de paso su flamante debut en el terreno del largometraje. Los detalles de la historia son una incógnita, pero el cineasta adelanta que el proyecto «va increíble. Estoy seguro que cuando finalmente la estrenemos va también a ser una pieza importante para la animación en México«.

Ni qué decir de su colaboración en Pinocchio, donde fungió como animador bajo las órdenes de Guillermo del Toro, en una experiencia que describe como un sueño que le permitió alcanzar la perfección. Aunque no puede decir mucho al respecto, no vacila en describir a la película de «absolutamente hermosa» y en anticipar que «va a ser la cumbre, el mejor proyecto de stop motion que se ha hecho«.

Y finalmente su presencia en el Centro Internacional de Animación, mejor conocido como el Taller del Chucho, donde labora en el desarrollo de proyectos al tiempo que contribuye en la formación de nuevos talentos. Se trata de un espacio encabezado por el ya mencionado del Toro en alianza con el Festival Internacional de Cine de Guadalajara y en el que se busca impulsar la animación actual y formar a las siguientes generaciones de animadores.

Radix habló en exclusiva con René Castillo en el marco del Guanajuato International Film Festival 2022, que cuenta con la presencia del realizador mexicano para el encuentro Un abanico de la animación mundial en el que creativos de diversas latitudes debaten el estatus de la industria contemporánea.