La animación peruana ha dado pasos decisivos hacia la consolidación en los últimos años. Ahora busca concretar uno de los más importantes: la ampliación de sus audiencias con producciones destinadas para los adultos y completamente alejadas del público infantil. Un esfuerzo para el que Cabeza Negra podría resultar determinante.

Se trata de la ópera prima de los artistas visuales Martín Aramburú y Diego Vizcarra. La dupla recurre a la animación 2D para contar una historia destinada a jóvenes y adultos, la cual que mezcla de elementos propios de la fantasía, el terror y el suspenso. Y claro, una fuerte carga social.

Su sinopsis habla de paisajes desérticos, calles oscuras del centro de la ciudad, huacas perdidas entre el concreto, basurales y techos de casonas viejas colmadas de gallinazos son el escenario de la historia de Ismael, un joven electricista que repara torres de alta tensión. Al ser testigo de la extraña muerte de un hombre, experimentará una revelación horrorosa sobre su origen que buscará esclarecer. Junto a sus amigos, Melissa y Leo, iniciará un viaje desquiciado por una urbe feroz, donde surgen la movida subte y la contracultura como reacción a la violencia y al caos.

Cabeza negra acumula un largo recorrido que comenzó en 2017 y que cada vez está más cerca de concretar. Para lograrlo, el proyecto ahora busca el respaldo del público con una campaña que busca reunir fondos para finalizar la posproducción. Apoyos que además se vinculan directamente con el lema ‘Hazlo tú mismo’ bajo el cual ha laborado el equipo que integra la cinta.

¿Quieres ser parte de la historia animada de Perú y de toda Iberoamérica? Ayudar es muy sencillo y ningún apoyo es poco. En agradecimiento, la producción ofrece distintas recompensas que van de menciones en los créditos a formar parte de la película como un personaje animado. La campaña termina el 14 de agosto.

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